Cómo Empezar a Meditar desde Cero

Cómo Empezar a Meditar desde Cero

Ocho pasos para empezar a meditar.

¿Siempre has querido meditar pero no sabes cómo empezar? ¿Has googleado y has encontrado tanta información que te abruma?


Cada vez más personas en el mundo optan por sumar a sus días una rutina o momentos de meditación. Esto se debe a los múltiples beneficios que este hábito trae tanto a nivel físico, como psíquico y emocional.


Si nunca has meditado o te parece difícil, primero quiero que te quedes con esta idea: meditar es simplemente un hábito. Es decir, se logra con el tiempo y sólo requiere práctica y constancia. Muchas personas creen que meditar es lograr dejar la mente en blanco por determinada cantidad de tiempo, pero déjame que te diga que esa idea no es cierta. Esa idea ha generado mucha frustración en personas que han intentado hacerse de este hábito, y lo cierto es que dejar la mente en blanco ni siquiera es el objetivo de meditar. Se medita para conocerse más, para mejorar la calidad de vida y para disfrutar de todos sus beneficios.


Meditar es mucho más sencillo de lo que parece. Es más, llegar al estado de meditación es una capacidad humana a la cual cualquier persona puede acceder, si se lo propone, claro.Hay múltiples maneras de llegar a dicho estado, aquí sí que podemos aplicar eso de que “todos los caminos conducen a Roma”, sólo necesitas tomar el camino más indicado para ti.


¿Te gustaría experimentar dicha cada día? ¿Te gustaría sentir más paz y motivación? ¿Tienes 10 minutos al día para probar? 


En esta Guía quiero compartirte un Paso a Paso simple para que te hagas del hábito de la meditación.

Advertencias previas

Si bien meditar es simple y sencillo, también es desafiante. Tu mente no entenderá nada y querrá distraerte, seguramente hasta se ponga más “parlanchina” de lo habitual. Aquí el secreto es tener paciencia. Es normal que las primeras veces sean las más difíciles, pero con el tiempo será cada vez más simple y liviano. Sólo se trata de ser constante.

Posiblemente sientas que “no estás haciendo nada” y tu mente te recuerde las mil cosas que aún tienes pendiente por hacer.

No te asustes por eso y recuerda que meditar es un hacer y que tú has decido tomar este nuevo hábito porque eres consciente de sus múltiples beneficios.

Por último, meditar quizás sea de las tareas que más nos llevan a conocernos a nostrxs mismxs. 

Quizás tu mente te recuerde cosas de ti o de tu vida que no te gustan, no te preocupes, todxs hemos pasado por allí. Es sólo información de ti para ti. Nadie puede juzgarte dentro tuyo, no lo hagas tú. ;)

Ahora sí, vamos al Paso a Paso

1- Qué dejar atrás

El primer pasito en este camino es dejar atrás cualquier idea previa que tengas sobre lo que es meditar, qué deberías sentir, cómo se debería de hacer, etc. Toda esa información sólo te distraerá y te hará creer que no lo estás haciendo bien.

2- Elige un sitio

Es muy importante que sea un espacio que te guste, que te motive a estar allí un tiempito y sobre todo y lo más importante que sea en un sitio dónde nadie te moleste. No necesariamente tiene que ser en tu casa, si lo prefieres puede ser en algún lugar tranquilo al aire libre.

3- Elige un momento del día

Para hacernos de un hábito es importante incluirlo en nuestra rutina. Meditar puede ser lo primero que hagas en el día, o lo último que hagas antes de dormir. Puede ser que prefieras hacerlo al salir del trabajo o luego de dejar a tus hijxs en la escuela. Tu eliges cuándo. Pero cuándo lo hagas trata de respetar ese momento hasta que meditar se haya vuelto un hábito. Por supuesto puedes cambiar de momento si así lo deseas o necesitas, pero luego trata de respetar ese nuevo momento. Con el tiempo verás que meditar será tan parte de rutina que no necesitarás ni pensar cuándo, será como cepillarte los dientes, simplemente lo harás.

4- Elige una postura que te resulte cómoda

Lo ideal es que puedas sentarte con la espalda erguida. No es necesario que sea de “canastita” en el suelo ni en postura de loto ni que adoptes una postura “de meditación”. Cualquier postura en la que puedas sostener tu espalda derecha está bien. Puedes apoyarte contra la pared o usar una silla si la necesitas. Lo importante es tener la columna erguida. Con el tiempo podrás ir probando diferentes posturas.

5- Cierra los ojos

Una vez que ya te encuentres cómodx en tu postura cierra los ojos e intenta mantenerlos cerrados durante toda la meditación. Si de pronto por cualquier cosa los abres, no te preocupes, simplemente vuelvelos a cerrar. Meditar se trata de lo que pasa dentro de ti, no fuera. 

6- Lleva tu atención a tu respiración

Intenta centrarte en ella. Siente el aire entrar a tu cuerpo a través de tus fosas nasales en cada inhalación, y en cada exhalación siente el aire cuando sale en tu labio superior. Siempre que tu atención esté en tu respiración y en nada más estarás meditando. (¡Sí!) Pero justamente este es el momento en que tu mente querrá invadirte, sólo no te preocupes porque es normal. Ese es el trabajo de la mente. Ahora le estás enseñando que puede tomarse un descanso y le costará aceptarlo. Cada vez que notes que te estás distrayendo con algún pensamiento, primero felicítate por notarlo y luego, simplemente vuelve la atención a tu respiración. Recuerda: el estado de meditación es ese mínimo espacio que existe entre un pensamiento y otro. Lo que hacemos con ejercicios de meditación es ampliar ese espacio cada vez más. 

7- Medita durante 10 minutos

No necesitas más que 10 minutos al día. Una vez que adoptes la postura cómoda pon en tu reloj o teléfono una alarma así puedes entregarte a la meditación sin pensar cuánto tiempo ha pasado. Y si, es completamente normal que te preguntes varias veces cuánto ha pasado ya durante la meditación y más en las primeras experiencias. Al principio parecerá eterno. Pero luego, se te pasará volando.

8- Sé paciente con tu proceso

Adquirir un nuevo hábito lleva tiempo. Quizás algún día olvides meditar, o no te de tiempo, o tengas que interrumpir la meditación por el motivo que sea. O quizás tú decides dejar de meditar en medio de la meditación. Quiero que sepas que eso también está bien. Eso no significa que tu proceso se haya echado a perder porque eso también es parte del proceso. La clave es que al día siguiente vuelvas a meditar. Si de pronto pasas semanas o meses sin meditar todo lo que has mejorado tu vida mientras meditaba no desaparece.“Nadie te quita lo meditado” y además puedes retomar tu práctica de meditación cuando quieras. 

Ahora sólo te queda experimentarlo. 


Quiero que seas bien consciente de que estás a punto de dar un gran paso en tu vida hacia un mayor bienestar. Esto significa que saldrás de  la zona de confort de tu mente y que puede que alguno de tus mecanismos de defensa se activen, para atravesar cualquier incomodidad que este proceso te proponga sólo tienes que hacer una sola cosa: centrarte en tu respiración por 10 minutos. Es un objetivo 100% alcanzable. Poco a poco sentirás paz mental, gratitud, alegría, vigor y optimismo. También notarás que desaparecerán pensamientos repetitivos. Y experimentarás también mejoras en tu cuerpo físico, puede ser que los dolores de cabeza disminuyan al igual que las taquicardias. Tu flujo energético se renovará. Quizás incluso notes mejoras en el sistema linfático y digestivo.

 

Consejos Finales

Si vas a usar música, que sea de alta vibración. No es necesario y muchas personas prefieren sólo el silencio. Pero si crees que con música te resultará más sencillo te recomiendo que uses música de alta vibración. Aquí te dejo una playlist que me gusta mucho: Playlist Música de Alta Vibración. El único requisito es que no olvides que la atención debe estar en la respiración y no en la música. 

No te compares. Ni con otra persona, ni contigx mismx. Seguramente haya personas que mediten más de 10 minutos al día, quizás algunas lo hagan más de una vez al día, quizás otras llevan años meditando y experimentando sus beneficios. También te pasará que algún día sentirás tu meditación más fluida y liviana que otras veces. Nada de eso importa. Nada de eso habla de tu proceso hoy. La meditación cada día te traerá un aprendizaje diferente cada día. Céntrate en tu proceso de hoy. Quizás descubras que seas de esas personas que sólo medita los fines de semana, ¿y sabes qué? Eso también está bien.

 

El objetivo de esta guía es darte consejos útiles para iniciarte en el mundo de la meditación.

Recuerda su simples pasos

  • Dejar atrás ideas previas
  • Elige un sitio que te guste
  • Elige un momento del día
  • Adopta una postura cómoda
  • Cierra los ojos
  • Lleva la atención a la respiración
  • Medita 10 minutos al día
  • Sé paciente con tu proceso

En internet verás que existen diversas meditaciones, te invito a probarlas una vez que ya tengas el hábito de meditar y así descubrir y valorar cuáles son las mejores opciones para tí.

Recuerda sólo se trata de encontrar tu propio camino.


¡Bienvenidx a tu mundo interior!